Nicotinell fruit 2mg chicles medicamentosos sabor frutal
Ayudan a controlar los problemas derivados del abandono del hábito de fumar
Producen una liberación de nicotina a través de la mucosa oral, que al estar altamente vascularizada llega rápidamente al torrente circulatorio y de allí al sistema nervioso, compensando los síntomas de la falta de Nicotina
Su ventaja consiste en la liberación de Nicotina por una vía diferente a la respiratoria, evitando la deposición de los resíduos del humo sobre la mucosa
Composición por chicle:
Nicotina 2mg
Excipientes: goma base, carbonato de sodio, sorbitol, carbonato de sodio anhidro, hidrogenocarbonato de sodio, polacrilina, glicerol, agua purificada, levomentol, saborizante tutti frutti, sacarina sódica, acesulfamo potásico, xilitol, manitol, gelatina, dióxido de titanio, cera de carnauba y talco
Para una liberación adecuada de la Nicotina sobre la mucosa oral se debe mastiar lentamente hasta notar un cambio de sabor, momento en el que se debe dejar el chicle en un lateral de la boca, volviendo a masticar en el momento en que desaparece el sabor, y así sucesivamente (Se debe hacer lentamente para no producir una liberación rápida de la nicotina del chicle)
Para fumadores de menos de 20 cigarrillos al día (Para fumadores de 20 a 30 cigarrilllos diarios se aconseja chiccles de 2mg a 4 mg de Nicotina)
Sabor frutal
ACCIÓN Y MECANISMO
- [ANTITABAQUISMO], [GANGLIOPLEJICO]. La nicotina es un agonista de receptores colinérgicos nicotínicos, situados fundamentalmente en los ganglios autonómicos, médula adrenal, placa neuromuscular y sistema nervioso central. Los efectos de la nicotina sobre el organismo son múltiples y variados, y dependen de la dosis administrada y del tono vegetativo de la persona.
La nicotina es además la responsable de la dependencia al tabaco en fumadores, posiblemente por dos mecanismos. A baja dosis parece presentar un efecto estimulante en el córtex a través del locus ceruleus, con incremento del estado cognitivo y de alerta. A dosis superiores parece dar lugar a un "efecto de recompensa" originado en el sistema límbico.
La interrupción brusca del tabaco tras un período prolongado de uso, da lugar a un síndrome de abstinencia característico, que incluye síntomas como disforia, insomnio, irritabilidad, enfado, ansiedad, dificultad de concentración, agitación, bradicardia y aumento del apetito con incremento de peso. También se aprecia ansia por la nicotina.
La administración de nicotina mediante parches o chicles ejerce unos efectos similares a la obtenida del tabaco, y proporciona, a quienes deseen dejar el hábito de fumar, la cantidad de nicotina suficiente para reducir la aparición de los síntomas de abstinencia. La dosis de nicotina se reduce progresivamente, hasta que el organismo puede prescindir de ella.
ANCIANOS
No se han realizado estudios farmacocinéticos específicos en ancianos, pero los efectos adversos y la tasa de recaída en pacientes mayores de 60 años es similar que en jóvenes. No obstante, en estos pacientes suele ser más frecuente la presencia de cardiopatías, y se ha descrito un ligero incremento de la incidencia de astenia, dolores corporales y mareos.
CONSEJOS AL PACIENTE
- Se aconseja reducir las dosis progresivamente, para evitar una recaída.
- Los preparados a base de nicotina pueden producir dependencia.
- Se aconseja notificar al médico cualquier síntoma de sobredosis como náuseas, vómitos, diarrea, mareos, debilidad o palpitaciones.
- Si aparece dolor torácico, se recomienda suspender el tratamiento y acudir al médico.
- No se debe fumar durante el tratamiento, ni combinar chicles o comprimidos con parches.
- Si se administra nicotina en mujeres lactantes, se deberá hacerlo al menos dos horas antes de amamantar al niño.
- No se recomiendan períodos de tratamiento mayores de 6 meses.
- El medicamento no debe dejarse donde pueda ser usado incorrectamente, manipulado o ingerido por niños, pues puede producir toxicidad severa que puede llegar a ser mortal.
CONTRAINDICACIONES
- Hipersensibilidad a cualquier componente del medicamento.
- No fumadores o fumadores ocasionales.
EMBARAZO
Seguridad en animales: En estudios con monas, la administración de un bolus de 2 mg/kg de nicotina intravenosa ha dado lugar a acidosis, hipoxia, hipercapnia e hipotensión del feto. El flujo sanguíneo uterino fue reducido un 30% al administrar una infusión de 0.1 mcg/kg/minuto.
Seguridad en humanos: El tabaquismo durante el último trimestre en la mujer embarazada puede causar daño fetal, como retraso en el crecimiento, riesgo de aborto espontáneo y aumento de la mortalidad perinatal, aunque su potencial teratogénico no ha sido claramente establecido. Se ha podido comprobar que el tabaco también puede reducir los movimientos respiratorios fetales. Estos efectos se han visto también con los chicles de nicotina.
Por lo tanto, se debe aconsejar a la embarazada que abandone por completo el hábito de fumar antes del tercer trimestre del embarazo. Debido al riesgo inherente que presenta también la administración de terapia sustitutiva de nicotina, se aconseja que antes de iniciar este tratamiento se recurra a programas educacionales y comportamentales.
No obstante, en embarazadas muy dependientes puede ser necesario recurrir a la terapia sustitutiva con nicotina. Esta terapia presenta menores riesgos que el tabaquismo, ya que las concentraciones plasmáticas de nicotina alcanzadas son menores y además no existe exposición a los hidrocarburos policíclicos y al monóxido de carbono.
El abandono del tabaco, con o sin terapia sustitutiva de nicotina, no debe ser emprendido individualmente por la paciente, sino como parte de un programa para dejar de fumar supervisado médicamente.
En el tercer trimestre, la nicotina presenta efectos hemodinámicos, como cambios en el ritmo cardíaco fetal, que pueden afectar al feto cerca del parto. Por lo tanto, después del sexto mes de embarazo la nicotina sólo debe usarse en embarazadas fumadoras que no hayan conseguido dejar de fumar en el tercer trimestre, y siempre bajo supervisión médica.
FARMACOCINÉTICA
- Absorción:
INDICACIONES
- [DEPENDENCIA AL TABACO]. Tratamiento coadyuvante en programas de deshabituación tabáquica, con el objetivo de aliviar los síntomas del síndrome de abstinencia a la nicotina.
Aunque estos productos mimetizan los efectos del tabaco, no deben ser nunca empleados como sustitutos del tabaco.